Estuve en el cine el día de la Constitución para ver... cine francés. Y estaba lleno el cine, por cierto. Supongo que a medida que aumenten los precios de todo comestible bajará el consumo de cine (y teatro y conciertos) y aumentarán las descargas por Internet. Subirá el canon digital y la SGAE incrementará sus beneficios. Que Teddy Bautista se haga rico a causa del aumento en la producción de biocombustibles es una más de las maravillas de este mundo globalizado.
Cine francés se hace mucho, ignoro si decreto mediante o sin el mismo. Pero parece que funciona porque los franceses van a verlo. Habrá quien diga que esto es gracias al famoso chovinismo vecino. Habrá quien diga que lo que pasa es que hacen buenas películas. Me inclino más por lo segundo. Chovinismo es que sólo aparezcan Renaults y Citroëns en todos sus filmes.
Y basta de introducción. La película que fui a ver es:
Juntos, nada más
Director: Claude Berry.
Guión: Claude Berry.
Actores: Audrey Tautou, Guillaume Canet, Laurent Stocker, Françoise Bertin.
Año: 2007.
Sinopsis
Camille (Audrey Tautou) es "experta en superficies". Trabaja limpiando unas oficinas. Con ello apenas saca lo suficiente para una pequeña buhardilla en un viejo y señorial bloque de viviendas parisino. Unos pisos mas abajo y en un inmenso piso viven Philibert (Laurent Stocker) y Franck (Guillaume Canet). Philibert, cuya familia es dueña del piso, es un noble amanerado que trabaja en un museo y tiene serios problemas para relacionarse con otras personas. Franck es un cocinero rudo y malhablado que sólo desea pasar cada noche con una chica distinta y colgarse. Para su desgracia, tiene que ocuparse de su abuela Paulette (Françoise Bertin), incapacitada tras una caída.
Camille pasará a formar parte de sus vidas: ¿qué sucederá entonces?. ¡¡¡Qué emoción!!!
Crítica
Juntos, nada más es la adaptación de la novela homónima de Anna Gavalda. El libro, que no he leído, ha sido todo un best-seller en Francia. La película, pues, tiene las intenciones bien claras: aprovecha el tirón del libro y trata de construir una historia sencilla con cuatro personajes peculiares. Junta algo de comedia, unas gotas de drama, un poco de romanticismo y un principio de intriga que se resume en la linea del anterior párrafo. Y que dura lo mismo.
Tiene además el gancho de Audrey Tautou, a la que le costará horrores desembarazarse de su magnético papel en Amelie. Sería necesario, y de agradecer, que algún día interpretase a una psicópata asesina, para variar. Mientras haga de chica tierna a la que todos quieren bien la tendré encasillada. La actriz cumple sobradamente su papel, al igual que el resto de protagonistas.
El problema de la película es la historia, que no aparece por ninguna parte. Uno se pregunta dónde habrán ido a parar las 600 páginas del libro. Porque, aunque se plantea interesante en sus inicios, la trama de la película queda en nada a medida que avanza. El final se adivina con siglos de antelación. Entre tanto, la transición entretiene.
Los personajes de Philibert y Paulette, pese a ser interesantes (un aristócrata tartamudo cerca de Camille y una vieja mordaz y acaparadora) aparecen y se esfuman sin más, para que la película quede en un mano a mano demasiado predecible entre Franck y Camille. La historia del aristócrata pasa a un segundo plano para servir únicamente de recurso humorístico. Y a la pobre Paulette la llevan a un lado, la llevan a otro y la desplazan de nuevo para quitarla de en medio cuando ya no se sabe que hacer con ella. Más que entrelazar historias, el director las superpone.
Está bien la música, que podemos disfrutar en el trailer. Y está bien que uno pasa el rato que dura con una sonrisa en el cine. Eso es de agradecer. Pero ya.
Lo mejor: las interpretaciones. El buen rato. Ir al cine en día de fiesta.
El papel del cine que tengo delante dice que la fotografía es maravillosa y que convierte al piso en un personaje más. Si lo dicen ellos será verdad y me sumo: el piso está magnífico en su papel de piso.
Lo peor: la película daba para mucho más.
Mi opinión: ya está dada. Esta película es al cine... lo que el fondo de armario a la ropa.
Cine francés se hace mucho, ignoro si decreto mediante o sin el mismo. Pero parece que funciona porque los franceses van a verlo. Habrá quien diga que esto es gracias al famoso chovinismo vecino. Habrá quien diga que lo que pasa es que hacen buenas películas. Me inclino más por lo segundo. Chovinismo es que sólo aparezcan Renaults y Citroëns en todos sus filmes.
Y basta de introducción. La película que fui a ver es:
Juntos, nada más
Director: Claude Berry.Guión: Claude Berry.
Actores: Audrey Tautou, Guillaume Canet, Laurent Stocker, Françoise Bertin.
Año: 2007.
Sinopsis
Camille (Audrey Tautou) es "experta en superficies". Trabaja limpiando unas oficinas. Con ello apenas saca lo suficiente para una pequeña buhardilla en un viejo y señorial bloque de viviendas parisino. Unos pisos mas abajo y en un inmenso piso viven Philibert (Laurent Stocker) y Franck (Guillaume Canet). Philibert, cuya familia es dueña del piso, es un noble amanerado que trabaja en un museo y tiene serios problemas para relacionarse con otras personas. Franck es un cocinero rudo y malhablado que sólo desea pasar cada noche con una chica distinta y colgarse. Para su desgracia, tiene que ocuparse de su abuela Paulette (Françoise Bertin), incapacitada tras una caída.
Camille pasará a formar parte de sus vidas: ¿qué sucederá entonces?. ¡¡¡Qué emoción!!!
Crítica
Juntos, nada más es la adaptación de la novela homónima de Anna Gavalda. El libro, que no he leído, ha sido todo un best-seller en Francia. La película, pues, tiene las intenciones bien claras: aprovecha el tirón del libro y trata de construir una historia sencilla con cuatro personajes peculiares. Junta algo de comedia, unas gotas de drama, un poco de romanticismo y un principio de intriga que se resume en la linea del anterior párrafo. Y que dura lo mismo.
Tiene además el gancho de Audrey Tautou, a la que le costará horrores desembarazarse de su magnético papel en Amelie. Sería necesario, y de agradecer, que algún día interpretase a una psicópata asesina, para variar. Mientras haga de chica tierna a la que todos quieren bien la tendré encasillada. La actriz cumple sobradamente su papel, al igual que el resto de protagonistas.
El problema de la película es la historia, que no aparece por ninguna parte. Uno se pregunta dónde habrán ido a parar las 600 páginas del libro. Porque, aunque se plantea interesante en sus inicios, la trama de la película queda en nada a medida que avanza. El final se adivina con siglos de antelación. Entre tanto, la transición entretiene.
Los personajes de Philibert y Paulette, pese a ser interesantes (un aristócrata tartamudo cerca de Camille y una vieja mordaz y acaparadora) aparecen y se esfuman sin más, para que la película quede en un mano a mano demasiado predecible entre Franck y Camille. La historia del aristócrata pasa a un segundo plano para servir únicamente de recurso humorístico. Y a la pobre Paulette la llevan a un lado, la llevan a otro y la desplazan de nuevo para quitarla de en medio cuando ya no se sabe que hacer con ella. Más que entrelazar historias, el director las superpone.
Está bien la música, que podemos disfrutar en el trailer. Y está bien que uno pasa el rato que dura con una sonrisa en el cine. Eso es de agradecer. Pero ya.
Lo mejor: las interpretaciones. El buen rato. Ir al cine en día de fiesta.
El papel del cine que tengo delante dice que la fotografía es maravillosa y que convierte al piso en un personaje más. Si lo dicen ellos será verdad y me sumo: el piso está magnífico en su papel de piso.
Lo peor: la película daba para mucho más.
Mi opinión: ya está dada. Esta película es al cine... lo que el fondo de armario a la ropa.
Pues sí, la película entretiene pero no da para mucho.
ResponderEliminaruna pena que no den mas protagonismo a Philibert, que para mi era la historia mas interesante, y en cuanto a la abuela pues creo que cumple perfectamente, no creo que su personaje pudiera dar mas de si.
Sin duda ese final prototípico de Amelie persigue a la pobre Audrey por donde pasa, y es una pena (por cierto que está horrible en esta película, me daba grimilla y todo).
Entretenida es, en todo caso.
Hola, sólo quería apuntarte que Audrey sí que ha hecho una peli en la que interpreta a una especie de psicópata ("Sólo te tengo a ti"), pero vamos, que tienes razón... incluso ahí parecía Amelie de mal humor... Un saludo!
ResponderEliminarGracias por el apunte, candy, habrá que ver más pelis de Audrey... aunque poco a poco, que altas dosis nunca son buenas. Y estoy de acuerdo con mr_guybrush: ¿qué delgada está, eh? ;-)
ResponderEliminarCoincido con lo de Philibert: al principio de la peli daba la impresión de que tendría un rol un poco más importante.
Un saludo.