¿Qué hacer cuándo es domingo, hace frío y viento y tu hermano pequeño se encuentra con fiebre?. Pues bajarte al videoclub a coger la última de Harry Potter. Bueno, es un poco una excusa, porque él ya la había visto en el cine y yo no. Pero cualquier excusa es buena, sobretodo si ver una película me obliga a escribir en el blog.
Vengan las presentaciones: sigo los libros de Harry Potter, me los he leído todos, y el último consiguió mantenerme leyendo del tirón las últimas 200 páginas hasta la 1 de la noche. Aunque lo intento, no consigo hacerlo con El Universo Elegante. Me fundo a las cuatro páginas. No es que ponga la saga un pedestal literario por encima de las sogas (esta broma es responsabilidad mía), pero los libros de HP me han entretenido y mucho. Las películas también, aunque no tanto. De hecho creo que todas no las he visto. Pero venga vamos que me estoy enrollando, hoy nos toca cine familiar:
Harry Potter y la Órden del Fénix
Director: David Yates
Guión: Michael Goldenberg
Actores: Daniel Radcliffe, Emma Watson, Rupert Grint, Imelda Staunton, Ralph Fiennes
Año: 2007
Sinopsis
Harry Potter (Daniel Radcliffe) está triste, ¿que le pasa a Harry Potter?. No duerme bien, tiene pesadillas, lo toman por loco... el Ministerio de Magia va a por él y a por Dumbledore, quienes afirman que el Innombrable ha regresado. Para ello, coloca a la terrible profesora Dolores Umbridge (Imelda Staunton) a cargo de Hogwarts. Sin embargo, ese será el menor problema de Harry cuando descubra las verdaderas intenciones del poderoso mago oscuro, con quien se encuentra misteriosamente ligado...
Crítica
Lo primero es reconocer que debe ser sencillo dirigir una película de Harry Potter. En general todas han salido bien, puesto que todos y cada uno de los libros son sustancialmente fílmicos: una historia principal, varias secundarias, caracteres muy marcados y un escenario perfectamente descrito. Así, dirigir una película de estas debe ser tirar de manual: si tienes una buena historia, mejor no especular con ella. Además si te apartas un poco del novelesco guion es fácil que los fans (y autora) se te echen al cuello.
Hay un problema y es la extensión del libro. En este caso, además, J.K.Rowling machaca su Olivetti con más de 950 páginas (en catalán). Y eso no es fácil de trasladar. El desafío consiste en quitar cosas sin que el conjunto quede manco, o cojo, o lo que sea. Desgraciadamente, en lugar de eliminar, el director parece que quiere poner de todo (aunque poco). El resultado es que, sobretodo al principio de la peli, los diálogos y escenas parecen cortadas, como si faltara algo más que decir: más que conversar, los personajes sentencian. Al menos esa sensación tenía yo.
Hay otras cosas con las que se puede ganar en el paso a la peli. La música por ejemplo, un aspecto cuidado en todas las de la saga. Las recreaciones de los escenarios son tan grandiosas que debo reconocer que superan lo que imagino al leer los libros. Mención especial para el castillo de Hogwarts, reconvertido en icono turístico gracias a las películas. Pero eso ya me lo esperaba, habiendo visto las anteriores.
Los personajes son los que más salen perdiendo en esta historia porque, por desgracia, no da mucho tiempo a desarrollarlos. Harry Potter es un niño insoportable en este libro y aquí apenas se le nota enfurruñado. No hay nada de la química entre Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson), ni de los amoríos de Ginny ni del desencanto de Sirius ni su rivalidad con Snape. Y de la relación de éste con el padre de Harry... ná de ná. Aquí sólo doy mención de honor a la caracterización de Ojo-Loco Murry y al espléndido malvado Voldemort (Ralph Fiennes) que si te pilla, te mata (sobre todo en un avión)1. Es un actor que creo puede bordar el papel del mago oscuro y sería de agradecer que en la siguientes películas dispusiera de mayor espacio.
¿Qué más? Esperaba ver esta película porque las cosas se empiezan a poner oscuras en la saga y, por qué no decirlo, porque Voldemort y Dumbledore se enfrentan por primera vez. La escena, aunque espectacular, me ha decepcionado un poco y la verdad es que me gustaría que hubiese sido más fiel a la recreación del libro.
¿Veis lo que decía?: te sales del 'guión' y se te tiran al cuello.
Lo mejor: la recreación del universo HP. Que es muy entretenida.
Lo peor: demasiado libro para tan poco metraje. Los personajes no quedan bien definidos.
Mi opinión: cine familiar en estado puro, divertida. No hay conflicto alguno entre cine y literatura: la película es en este caso el complemento ideal del libro.
1 Esa broma también es mía, qué pasa.
Vengan las presentaciones: sigo los libros de Harry Potter, me los he leído todos, y el último consiguió mantenerme leyendo del tirón las últimas 200 páginas hasta la 1 de la noche. Aunque lo intento, no consigo hacerlo con El Universo Elegante. Me fundo a las cuatro páginas. No es que ponga la saga un pedestal literario por encima de las sogas (esta broma es responsabilidad mía), pero los libros de HP me han entretenido y mucho. Las películas también, aunque no tanto. De hecho creo que todas no las he visto. Pero venga vamos que me estoy enrollando, hoy nos toca cine familiar:
Harry Potter y la Órden del Fénix
Director: David YatesGuión: Michael Goldenberg
Actores: Daniel Radcliffe, Emma Watson, Rupert Grint, Imelda Staunton, Ralph Fiennes
Año: 2007
Sinopsis
Harry Potter (Daniel Radcliffe) está triste, ¿que le pasa a Harry Potter?. No duerme bien, tiene pesadillas, lo toman por loco... el Ministerio de Magia va a por él y a por Dumbledore, quienes afirman que el Innombrable ha regresado. Para ello, coloca a la terrible profesora Dolores Umbridge (Imelda Staunton) a cargo de Hogwarts. Sin embargo, ese será el menor problema de Harry cuando descubra las verdaderas intenciones del poderoso mago oscuro, con quien se encuentra misteriosamente ligado...
Crítica
Lo primero es reconocer que debe ser sencillo dirigir una película de Harry Potter. En general todas han salido bien, puesto que todos y cada uno de los libros son sustancialmente fílmicos: una historia principal, varias secundarias, caracteres muy marcados y un escenario perfectamente descrito. Así, dirigir una película de estas debe ser tirar de manual: si tienes una buena historia, mejor no especular con ella. Además si te apartas un poco del novelesco guion es fácil que los fans (y autora) se te echen al cuello.
Hay un problema y es la extensión del libro. En este caso, además, J.K.Rowling machaca su Olivetti con más de 950 páginas (en catalán). Y eso no es fácil de trasladar. El desafío consiste en quitar cosas sin que el conjunto quede manco, o cojo, o lo que sea. Desgraciadamente, en lugar de eliminar, el director parece que quiere poner de todo (aunque poco). El resultado es que, sobretodo al principio de la peli, los diálogos y escenas parecen cortadas, como si faltara algo más que decir: más que conversar, los personajes sentencian. Al menos esa sensación tenía yo.
Hay otras cosas con las que se puede ganar en el paso a la peli. La música por ejemplo, un aspecto cuidado en todas las de la saga. Las recreaciones de los escenarios son tan grandiosas que debo reconocer que superan lo que imagino al leer los libros. Mención especial para el castillo de Hogwarts, reconvertido en icono turístico gracias a las películas. Pero eso ya me lo esperaba, habiendo visto las anteriores.
Los personajes son los que más salen perdiendo en esta historia porque, por desgracia, no da mucho tiempo a desarrollarlos. Harry Potter es un niño insoportable en este libro y aquí apenas se le nota enfurruñado. No hay nada de la química entre Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson), ni de los amoríos de Ginny ni del desencanto de Sirius ni su rivalidad con Snape. Y de la relación de éste con el padre de Harry... ná de ná. Aquí sólo doy mención de honor a la caracterización de Ojo-Loco Murry y al espléndido malvado Voldemort (Ralph Fiennes) que si te pilla, te mata (sobre todo en un avión)1. Es un actor que creo puede bordar el papel del mago oscuro y sería de agradecer que en la siguientes películas dispusiera de mayor espacio.
¿Qué más? Esperaba ver esta película porque las cosas se empiezan a poner oscuras en la saga y, por qué no decirlo, porque Voldemort y Dumbledore se enfrentan por primera vez. La escena, aunque espectacular, me ha decepcionado un poco y la verdad es que me gustaría que hubiese sido más fiel a la recreación del libro.
¿Veis lo que decía?: te sales del 'guión' y se te tiran al cuello.
Lo mejor: la recreación del universo HP. Que es muy entretenida.
Lo peor: demasiado libro para tan poco metraje. Los personajes no quedan bien definidos.
Mi opinión: cine familiar en estado puro, divertida. No hay conflicto alguno entre cine y literatura: la película es en este caso el complemento ideal del libro.
1 Esa broma también es mía, qué pasa.
Yo no he leído ninguno de los libros pero creo que he visto casi todas la películas. Esta fue sin duda la que más me decepcionó. Las otras en general son entretenidas y están bien dirigidas.
ResponderEliminarA esta, tal y como dices, le falta algo.
Siempre pasa, cuando intentas condensar tanto material en unos cuantos minutos, el conjunto pierde.
ResponderEliminarAún con el señor de los anillos, que probablemente sea la mejor adaptación de un libro que se ha hecho, si no has leido la saga, te sientes durante toda la pelicula algo perdido ante tanta referencia sin explicar, y acabas asumiendo que en ese mundo las cosas son así, y punto. Si posteriormente lees el libro lo ves todo desde una nueva perspectiva.
En cuanto a harry potter he visto la primera pelicula y leido el tercer libro, (ya, ya, algun día pienso leerlos todos xD) y mientras el libro me lo leí de un tiron la pelicula me hizo bostezar en un par de ocasiones.